viernes, 25 de febrero de 2011

Futuro perfecto

Frío, mucho frío. No tanto por la temperatura, si no por el frío que lleva a cuestas.
Se queda uno frío viendo tantas desgracias piensa. Pero hoy no va a dejar que nada de eso le cambie el humor, hoy ha decidido ser feliz.

Atraviesa el jardín de al lado de tu casa y se fija en que empieza salir el verde, aunque sea levemente, el tiempo parece que va cambiando. “Aún queda mucho invierno” piensa, “pero lo peor ya ha pasado”.

Camina con alegría saltando los charcos que ha provocado el barrendero regando las calles “nunca entenderé este desperdicio de agua” se dice a sí mismo.



Se gira y se fija en ella, la que siempre está ahí, dando su mejor cara a pesar de los años. Saluda a la Pulchra y continúa camino sorteando las obras de Sierra Pambley. Acelera el paso para no mancharse de polvo la ropa de los domingos y pronto atisba el Gran Café al final de la calle. Recuerda grandes conciertos en pequeño espacio, la sonoridad de las guitarras o el olor a tabaco rancio, el ambiente cargado… Por una parte, todo está mejor ahora.

Continúa calle abajo, a su izquierda el Mesón del Cid,  un poco más adelante la extraña escultura del hombre en su pedestal, como mirando desde la distancia los problemas y preocupaciones de los viles mortales, por él los años no pasarán.

De pronto se para, indecisión… ¿mejor por arriba o por abajo? ¿Por Santo Domingo o por la Torre? Mejor por Santo Domingo, a estas horas no hay tanta gente y se pueden cruzar los semáforos en rojo sin peligro.

Llega a toda prisa a Santo Domingo y tal y como predijo, apenas hay gente. Cruza los pasos de peatones en rojo, corriendo a ratos. Juega a no pisar los rayas, como cuando era niño y sonríe.

Encara la Avenida San Marcos y casi está en su destino, cruza la calle a toda prisa y se adentra en el patio. Debajo de una escalerilla se encuentra la puerta a otro futuro distinto, un futuro mejor.

Abre la puerta y saluda con un sonoro “Buenos días” el dependiente le saluda con simpatía ensayada.



-¿Han llegado ya mis libros?.
-Aquí los tienes, espero que te ayuden.
-Por supuesto que sí, muchas gracias.

Paga de manera mecánica y recoge los libros, huelen a nuevo, a oportunidades, a futuro.

Sale de la librería y sonríe, todo irá mejor, hoy es el primer día de una nueva vida, hoy es un poco más feliz.




 



Dimas

No hay comentarios: